Los alumnos del Taller de Plástica, junto a su monitora, prepararon un espantapájaros para nuestro huerto. No lo hemos colocado, no ha hecho falta su trabajo, pero hemos querido inmortalizarlo en estas fotos junto a algunos alumnos de 4º de Primaria.
Este es el aspecto de nuestro huerto en Junio. Hemos aprendido mucho durante este curso sobre horticultura, y vamos a continuar con esta experiencia el curso próximo. Las hortalizas que mejor se nos dieron, fueron las acelgas y lechugas. También hemos recogido buenos pepinos (no muchos), grandes puerros y algunas fresas. Los calabacines no crecen como deberían, empezaremos a quitar algunas hojas (las plantas son muy grandes) como nos han aconsejado.
El riego por goteo tiene sus problemas, y el terreno inclinado, en algunas partes, hace que haya excesiva agua entre ciertos surcos, y las matas no pueden soportar el peso de los tomates, que sin embargo aún no han madurado. Estamos a la espera de recoger las patatas, cuando las hojas y flores comiencen a amarillear.
La salvia, que da un toque de color a nuestro huerto y la lavanda (espliego) se han convertido en dos hermosas plantas.
La semana próxima acaban las clases, y ya podemos decir que, para esas fechas, todos los alumnos del colegio habrán podido probar algún producto del huerto que con sus trabajos y cuidados a lo largo del curso, han ayudado a construir y mantener.
Este es el aspecto de nuestro huerto en Junio. Hemos aprendido mucho durante este curso sobre horticultura, y vamos a continuar con esta experiencia el curso próximo. Las hortalizas que mejor se nos dieron, fueron las acelgas y lechugas. También hemos recogido buenos pepinos (no muchos), grandes puerros y algunas fresas. Los calabacines no crecen como deberían, empezaremos a quitar algunas hojas (las plantas son muy grandes) como nos han aconsejado.
El riego por goteo tiene sus problemas, y el terreno inclinado, en algunas partes, hace que haya excesiva agua entre ciertos surcos, y las matas no pueden soportar el peso de los tomates, que sin embargo aún no han madurado. Estamos a la espera de recoger las patatas, cuando las hojas y flores comiencen a amarillear.
La salvia, que da un toque de color a nuestro huerto y la lavanda (espliego) se han convertido en dos hermosas plantas.
La semana próxima acaban las clases, y ya podemos decir que, para esas fechas, todos los alumnos del colegio habrán podido probar algún producto del huerto que con sus trabajos y cuidados a lo largo del curso, han ayudado a construir y mantener.
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